Ya habían pasado 300 años desde los comienzos de la colonización en América y las cosas habían cambiado... y mucho. En 1776 Estados Unidos había logrado su independencia, un ejemplo para el resto de los países ya que la había logrado con esfuerzo y sangre contra Inglaterra. Pero más de treinta años después el problema europeo era otro, el emperador Francés, Napoleón Bonaparte.
He aquí que para 1808 en Chile ya querían tener su gobierno propio aunque la intención no duró mucho y para 1809 en Perú también surgieron movimientos emancipadores pero no lo suficiente, siempre una junta criolla (las independencias en américa latina fueron posteriores a sus gobiernos criollos, fue una reforma, no una revolución en muchos casos).
En 1810 llegaron las noticias a Buenos Aires, vía barcos ingleses (enemigos de la Francia Napoleónica y aliados de España en esas guerras) de que el Rey Fernando VII había caído en desgracia (prisionero de los franceses, uds. saben como eran esas estadías horrorosas en cárceles que eran castillos, con servidumbre y lujos... pero prisionero en fin!) y Cisneros, el virrey del Virreinato del Río de la Plata tembló ante la noticia.
Rápido como era trató de asegurarse el dominio de la situación tratando de convencer a Saavedra, quien mandaba en las tropas de Buenos Aires, pero éste le aclaró que las tropas no iban a mover un pelo para mantener el virreinato con ese virrey, y convocaron a un Cabildo Abierto al alcalde Juan José Lezica junto con Belgrano.
El 20 de Mayo se celebró una reunión de patriotas y se comisionó a Castelli y a Martín Rodríguez para que exigiesen al virrey la reunión de un cabildo abierto. Cisneros concedió el permiso, celebrándose el día 22 dicho cabildo que votó por la cesación del virrey. El problema que se daba es que en la junta que se organizó iba a presidir el mismísimo virrey, pero la gente no estuvo muy de acuerdo, muchos se agolparon en lo de Rodriguez Peña para organizarse y levantarse en armas "¿Por qué hemos de dejar que quede el Virrey? ¿Por qué?" se calentaba Chiclana y andaba a las puteadas por todos lados, se cruzaba con French, Beruti, Martinez, Melián, si, todos nombres de calles hoy en día.
Cornelio Saavedra, que no se la miraba, reaccionó como correspondía y esa misma noche del 24 de mayo lo apretó convenientemente a Cisneros para que, de una vez, deje su cargo y no moleste más.
Agitada noche de 24 y amanecer nublado y lluvioso del 25, como casi todos los 25 de mayo en Argentina, será que recuerda el clima esas fechas o que estamos en otoño y que cuernos... corresponde que llueva! obviedades astronómicas y metereológicas aparte.
Al día siguiente French y Berutti "agitaban el rancho" como es bien sabido, mientras tempranito se reunía el Cabildo para considerar la renuncia de Cisneros, French hizo de las suyas y se le ocurrió un distintivo para los patriotas, pasó por unas tiendas de la Recova y se choreó unas cintas blancas y celestes como las que utilizaron los Patricios en las invasiones inglesas (años antes) y que habían adoptado los patriotas días antes.
Para los que crean que los piqueteros son novedad, French repartió tijeras y cintas entre los PIQUETES de la plaza del cabildo y dejó orden de prohibir el paso a quien no llevase el distintivo o no quiera ponérselo, es que señores, ese tipo de imposiciones son normales en esos momentos, jeje. Se dice que Berutti fue el primero en llevar los colores en su sombrero, andá a saber, por ahí fue French que por jugarle una joda le ensartó una escarapela en el copete y el otro no se daba cuenta, pero la historia los recuerda bien, aunque no tengan grandes calles por cierto.
Inmediatamente se metieron en el Cabildo exigiendo que se terminen con las vueltas y que se haga caso del pedido popular, tomando pluma y papel armaron la nueva junta, presidente y comandante de armas Cornelio Saavedra; vocales Juan José Castelli, Manuel Belgrano, Miguel de Azcuénaga, Manuel Alberti, Domingo Matheu y Juan Larrea; y secretarios Juan José Paso y Mariano Moreno. Si, más calles todavía, ahora entienden porqué se llaman así?? porque a ellos les deben mucho, sépanlo.
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